Octubre y noviembre han sido meses intensos de formación, pero también muy gratificantes. Durante este tiempo, he tenido el privilegio de impartir varios cursos que me han permitido conectar con muchas personas, aprender junto a ellas y, sobre todo, acompañarlas en su camino hacia la mejora de sus habilidades digitales. Este viaje ha sido especialmente significativo por el impacto que estos cursos han tenido, no solo en las alumnas y alumnos, sino también en mí.
Octubre: TECEM3 – Reducción de la brecha de género en el entorno digital
El mes de octubre comenzó con una experiencia increíble, formando parte, un año más, del proyecto TECEM3, promovido por la Fundación Farrah y el Cabildo de Gran Canaria. Este proyecto tiene como objetivo reducir la brecha de género en el entorno digital, y he tenido la suerte de formar a un grupo de mujeres emprendedoras, comprometidas y con una energía increíble.
En estas formaciones, hablamos de marketing digital, Instagram profesional, creación de contenido para redes sociales, marca personal, LinkedIn, herramientas digitales, teletrabajo, presentaciones y Canva. Cada una de estas alumnas aportó algo único a las clases, creando un ambiente dinámico y lleno de participación. Su entrega y predisposición para aprender no solo hicieron que las clases fueran más amenas, sino que también me motivaron a seguir dando lo mejor de mí.
Es un privilegio poder formar parte de un proyecto que busca empoderar a las mujeres a través del conocimiento y la digitalización. Me alegra mucho ver cómo cada una de ellas aplica lo aprendido para mejorar sus emprendimientos y le ponen la mayor de las ganas.
Noviembre: PRECE Canarias – Programa de Autoempleo y Creación de Empresas
En noviembre, mi ruta continuó con el programa PRECE Canarias, en el que he impartido los módulos de «Branded Content y Marketing Digital» y «Posicionamiento Web, SEO y SEM». Estas formaciones se realizaron en Arucas y Vecindario, y fueron otro punto culminante de este recorrido formativo.
Mi agradecimiento especial para Ángel Matas, director del programa en Arucas, por su apoyo y mentorización. Ángel ha sido una pieza clave en la organización de este curso, y su ayuda me permitió sacar lo mejor de mí y ofrecer una formación dinámica y valiosa para los alumnos. Agradezco profundamente su compromiso y el trabajo conjunto que facilitó el éxito de este curso.
Lo que más me ha impactado de estas formaciones es la participación de los alumnos. La gran mayoría estuvieron completamente comprometidos, demostrando una gran disposición y curiosidad por aprender, lo que hizo que las clases fueran mucho más interesantes y productivas. La capacidad de involucrarse activamente en el proceso de aprendizaje es algo que valoro muchísimo, y este grupo de alumnos ha dado ejemplo de ello.
Mi agradecimiento va también para todos los alumnos y alumnas de ambos meses de formación. Sin su predisposición, atención y participación, las clases no hubieran tenido el mismo impacto. Ellos han sido el motor que ha hecho que todo lo aprendido sea aún más significativo.
Para mí, lo más importante es que cada uno de ellos haya salido con herramientas concretas para poner en marcha sus proyectos, mejorar sus habilidades o, simplemente, sentirse más preparados para afrontar los retos del entorno digital. Ver cómo las personas adquieren confianza en sí mismas y en sus capacidades es, sin duda, lo que más me motiva a seguir enseñando.
Reflexión final
Cada formación, cada alumno y cada experiencia es un paso más hacia un aprendizaje constante. Octubre y noviembre no solo han sido meses de enseñanza, sino también de aprendizaje para mí. He podido comprobar una vez más que cada persona que pasa por mis clases aporta algo único, y eso hace que cada sesión sea un intercambio valioso.
Ser docente y dar clases es para mí, mucho más que un trabajo, porque siento que de verdad quiero ayudar a cada una de esas personas que están esforzándose por impulsar su emprendimiento o su empresa. Y aunque algunas jornadas son realmente agotadoras por el número de horas que se dedican en formaciones, tutorías y papeleos; es muy gratificante cuando ves la alegría y el progreso de cada persona a la que ayudas.
Si algo me ha quedado claro es que el mundo digital es un entorno lleno de oportunidades, y que compartir el conocimiento y la experiencia con otras personas es un privilegio que me permite seguir creciendo. Gracias a todas las personas que han formado parte de este viaje en los últimos meses. Estoy emocionada de poder ayudarles, con mi granito de arena, en su camino hacia el éxito.
